PRÁCTICA DE LABORATORIO

 

GLOBOS ESCAPISTAS

INTRODUCCIÓN:

Los globos escapistas suben por la misma razón que el globo aerostático y esto se explica con el Principio de Arquímedes, el cual se incluye en una de las ramas de la física que se llama hidrostática y estudia los fluidos como el aire y el agua en reposo.

MATERIALES:

• 12 pliegos de papel china de diferentes colores
• Pegamento blanco
• Engrapadora
• Plumón
• Regla
• Tijeras
• 4 trozos de hilo de 2m
• Una secadora de cabello

PROCEDIMIENTO:

1. Toma dos pliegos de papel china y pégalos por el lado más corto, a medio centímetro del borde, para que te quede una hoja grande.
2. Haz lo mismo con los otros diez pliegos para obtener en total seis hojas grandes.
3. Ahora dobla todas las hojas por la mitad a lo largo y después mételas unas dentro de otras haciendo coincidir las esquinas.
4. Cuando tengas todas las hojas juntas y los bordes coincidan, engrápalas.
5. Con el plumón dibuja una figura como medio jarrón.
6. Separa las figuras que recortaste. Estas formarán el cuerpo de nuestro globo. Ahora coloca pegamento blanco en el contorno de una de las figuras, pero sólo en la mitad.
7. Toma otra figura y pega la mitas de su contorno con el borde de la figura a la que pusiste pegamento.
8. Pega la tercera de la misma forma que en el paso anterior a una de las dos figuras que acabas de pegar. Repite el proceso hasta que termines de pegar todas las hojas y déjalas secar por lo menos dos horas.
9. Procura no dejar agujeros en el cuerpo del globo, pues al inflarlo, el aire caliente puede escaparse.
10. Por último, pega las tiras de hilo en la boca del globo. Ahora, toma la secadora y calienta el aire del interior del globo (no la pongas muy adentro, se puede quemar el papel).

CONCLUSIÓN:

El globo sube al igual que el globo aerostático. El principio de Arquímedes dice que todo cuerpo dentro de un fluido está siendo empujado hacia arriba, con una fuerza igual al peso del fluido desalojado. Nosotros también estamos dentro de un fluido: el aire, que nos está empujando hacia arriba, sólo que otra fuerza nos atrae hacia abajo, la gravedad, que nos mantiene en la superficie valiéndose de nuestro peso.